Las resinas dentales son materiales utilizados en odontología para diferentes propósitos restaurativos y estéticos.
Entre las funciones restaurativas de las resinas dentales, se encuentran:
- Restauración de caries: Las caries dentales son áreas de desmineralización en el esmalte y la dentina causadas por la acción de bacterias. Cuando una caries no se trata, puede progresar y afectar capas más profundas del diente, causando dolor y una posible infección. Las resinas dentales se utilizan para restaurar los dientes afectados por caries al eliminar el tejido cariado y rellenar el espacio resultante con el material de resina. El dentista prepara el diente, elimina la caries, limpia la cavidad y coloca la resina en capas sucesivas. Esto restaura la forma y la función del diente, al tiempo que detiene la progresión de la caries.
- Reparación de fracturas: Las fracturas dentales pueden ocurrir debido a traumas, fuerzas masticatorias excesivas, o como resultado de lesiones deportivas o accidentes. Dependiendo de la gravedad de la fractura, las resinas dentales pueden ser utilizadas para restaurar la estructura del diente y protegerlo contra daños adicionales. En el caso de fracturas leves o astillamientos, el dentista puede aplicar resina directamente sobre la superficie del diente para reparar la fractura y restaurar la estructura. Para fracturas más extensas, puede ser necesaria una restauración más compleja, como una corona o un puente dental, donde las resinas dentales también pueden servir como material de unión o recubrimiento estético.
- Tratamiento de abrasiones: Las abrasiones son pérdidas de tejido dental causadas por el cepillado excesivo, el uso de técnicas de cepillado incorrectas o algún daño causado por las fuerzas aplicadas a los dientes. Estas lesiones causan sensibilidad dental y deterioro estético. Las resinas dentales se utilizan para restaurar las áreas abrasadas mediante la aplicación de capas delgadas de resina sobre la superficie del diente. Esto no solo protege el área contra el desgaste adicional, sino que también restaura la apariencia estética del diente, devolviéndole su forma natural.
- Prevención y tratamiento de erosiones: Estas son pérdidas de tejido dental causadas por la acidez directa sobre los dientes, como el consumo excesivo de bebidas ácidas o el reflujo. Las resinas dentales son utilizadas para prevenir o tratar la erosión aplicando recubrimientos protectores sobre las superficies dentales vulnerables. Estos recubrimientos, actúan como una barrera física que protege el esmalte dental contra la exposición ácida.
Además de sus funciones restaurativas, las resinas también se utilizan para mejorar la estética dental:
- Corrección de la forma dental: La forma de los dientes puede variar entre las personas e influye notablemente en la estética de la sonrisa. Algunas personas pueden tener dientes con formas irregulares, puntiagudas o desgastadas. Las resinas dentales ofrecen una solución ideal para corregir estas irregularidades y mejorar la estética de la sonrisa. Se utilizan técnicas de esculpido de resina para dar forma y contornear los dientes según las necesidades del paciente.
- Ajuste del tamaño dental: Los dientes demasiado grandes o pequeños pueden afectar la apariencia general del rostro. Con las resinas dentales, Se pueden ajustar el tamaño de los dientes para que se adapten mejor a las proporciones faciales del paciente y mejoren la estética de la sonrisa.
- Mejora del color: El oscurecimiento, decoloración o manchas en los dientes pueden ser causados por el envejecimiento, el consumo de alimentos y bebidas pigmentadas, el tabaquismo o el uso excesivo de ciertos medicamentos. Las resinas dentales nos permiten mejorar el color dental y lograr una sonrisa más blanca y brillante. Se pueden utilizar resinas de diferentes tonos y opacidades para igualar el color de los dientes naturales o cubrir manchas superficiales.
Resistentes al desgaste
La razón principal de la mejora en la resistencia de las resinas dentales se basa en su composición, ya que combinan una matriz de resina, que puede ser acrílica o de uretano, con partículas de relleno. Estas partículas, que pueden ser de cerámica, vidrio o cuarzo, se agregan para fortalecer el material y mejorar su capacidad para resistir la abrasión y el desgaste.
Durante el procedimiento de colocación y esculpido de la resina, nos aseguramos de que la restauración esté adecuadamente adaptada a la estructura dental y que se haya logrado una oclusión adecuada. Esta adaptación permite que la carga masticatoria se distribuya uniformemente sobre la restauración, reduciendo así el riesgo de desgaste prematuro o fractura.
Completamente seguras
Las resinas dentales son consideradas biocompatibles porque son seguras para su uso en la boca y no causan reacciones adversas en los tejidos. Esto significa que no provocan irritación, sensibilidad u otras respuestas negativas en las encías, los tejidos blandos de la boca o el sistema inmunológico del paciente.
Además, tienen la capacidad de adherirse al diente de una forma más práctica, sin necesidad de preparaciones invasivas que implican la remoción excesiva de tejido dental sano. Esto permite un procedimiento más conservador en la preparación del diente para la restauración, especialmente en casos donde se necesita tratar áreas de caries. La conservación de más tejido sano mantiene la estructura del diente, y ayuda a prevenir problemas futuros.
¿Necesitan un cuidado especial?
El cuidado de las restauraciones de resina dental no implica un mantenimiento extraordinario, pero algunas prácticas son necesarias para su durabilidad y función a largo plazo.
Para empezar, una higiene oral adecuada es lo más importante. Esto implica cepillarse los dientes al menos dos veces al día con pasta dental fluorada y usar hilo dental diariamente para eliminar la placa y los restos de comida entre los dientes y alrededor de las restauraciones.
Además de la higiene oral regular, evitar alimentos y bebidas que puedan manchar las restauraciones de resina dental es importante para conservar su apariencia estética. Algunos alimentos y bebidas, como el café, el té, el vino tinto y los alimentos con colorantes intensos pueden causar manchas en las resinas con el tiempo. Se recomienda limitar el consumo de estos productos y enjuagar la boca con agua después de su consumo para minimizar el riesgo de manchas.
De igual manera, es importante evitar hábitos perjudiciales que puedan comprometer la salud de las restauraciones. Morder objetos duros, como bolígrafos o hielo, o utilizar los dientes como herramientas para abrir envases, puede dañar las resinas y reducir su vida útil. Por lo tanto, evita estos hábitos y protege las restauraciones de cualquier actividad que pueda ponerlas en riesgo de fractura o desgaste prematuro.
Finalmente, son importantes las visitas regulares al dentista. En Clínica Cherizola Clavell nos encargamos de realizar limpiezas profesionales para eliminar la acumulación de placa y sarro, así como evaluar la salud de las restauraciones y realizar cualquier ajuste necesario. Además, te proporcionaremos orientación personalizada sobre el cuidado y mantenimiento adecuados de las restauraciones, según tus necesidades.
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