La limpieza dental, también conocida como profilaxis dental, es un procedimiento odontológico preventivo que se realiza para mantener la salud bucal y prevenir problemas dentales. Durante una limpieza dental, el dentista elimina la placa dental y el sarro acumulados en los dientes y debajo de la línea de las encías.
La placa dental es una capa pegajosa compuesta principalmente por bacterias, restos de alimentos y saliva. Si no se elimina mediante el cepillado y el uso de hilo dental, la placa puede endurecerse y convertirse en sarro, también conocido como cálculo dental. El sarro es una acumulación mineralizada que se adhiere firmemente a la superficie de los dientes y solo puede ser removido mediante instrumentos dentales especializados.
Procedimiento
- Antes de comenzar la limpieza dental, el dentista realiza un examen general de la boca del paciente para evaluar su salud bucal general. Esto puede incluir la inspección de los dientes o encías en busca de problemas como caries, enfermedades de las encías u otros trastornos.
- Utilizando instrumentos especiales como un raspador dental, el dentista limpia la placa y el sarro de la superficie de los dientes y debajo de la línea de las encías, sin causar daño al esmalte dental.
- Después de eliminar la placa y el sarro, el siguiente paso es pulir los dientes para eliminar las manchas superficiales y alisar la superficie. Esto se hace utilizando una pasta de pulido y una herramienta rotativa llamada profilaxis, que ayuda a dejar los dientes limpios y brillantes.
- Se aplica fluoruro en forma de gel, espuma o barniz sobre los dientes. El fluoruro ayuda a fortalecer el esmalte dental y a prevenir la formación de caries.
¿Cómo actúa el fluoruro en tus dientes?
El esmalte dental, la capa exterior y más dura de los dientes, está compuesto principalmente por cristales de hidroxiapatita, que son susceptibles al ataque ácido causado por bacterias. Cuando estos ácidos disuelven parte de los cristales de hidroxiapatita, se produce la desmineralización del esmalte, lo que puede dar lugar a la formación de caries. El fluoruro se incorpora en el proceso de remineralización al reemplazar los iones de hidroxilo en la hidroxiapatita con iones de fluoruro, formando fluorapatita. La fluorapatita es más resistente a los ácidos y más difícil de disolver que la hidroxiapatita, lo que fortalece el esmalte dental y lo hace más resistente a la desmineralización y a la formación de caries.
El fluoruro también puede interferir con la actividad metabólica de las bacterias presentes en la placa dental, ya que interfiere con este proceso al inhibir enzimas presentes en el metabolismo de las bacterias, lo que reduce su capacidad para producir ácidos.
Además de inhibir esta actividad metabólica, el fluoruro también cuenta con propiedades antimicrobianas que pueden ayudar a reducir la carga bacteriana en la placa dental. Se ha demostrado que el fluoruro afecta las membranas celulares bacterianas, lo que puede interferir con su capacidad para crecer y multiplicarse. Al reducir la cantidad de bacterias en la placa dental, el fluoruro consigue mantener un equilibrio saludable de microorganismos en la boca.
Beneficios de la limpieza dental
- Uno de los beneficios más importantes de la remoción de placa y sarro durante la limpieza dental es la prevención de enfermedades periodontales, como la gingivitis y la periodontitis. La gingivitis es la inflamación de las encías, que pueden volverse rojas, hinchadas y propensas a sangrar con facilidad. Si la gingivitis no se trata adecuadamente, puede progresar hacia la periodontitis, una enfermedad más grave que implica la destrucción del tejido periodontal y la pérdida ósea alrededor de los dientes. La limpieza dental regular ayuda a mantener las encías libres de placa y sarro, reduciendo así el riesgo de estas enfermedades periodontales.
- Además de la prevención de enfermedades de las encías, la limpieza dental también es capaz de reducir el riesgo de caries dental. Las bacterias presentes en la placa pueden producir ácidos que erosionan el esmalte dental, dando lugar a la formación de caries. Al eliminar la placa durante la limpieza dental, se reducen las bacterias que causan estas caries.
- Otro beneficio de la limpieza dental es la mejora del aliento. Las bacterias que se acumulan en la placa y el sarro pueden producir compuestos volátiles de azufre, que son responsables del mal aliento, por lo que la limpieza dental reduce las fuentes de mal olor en la boca, dejando un aliento más fresco y agradable.
- La limpieza dental permite la detección temprana de problemas como caries incipientes, fracturas dentales, y otros trastornos que pueden no ser evidentes para el paciente. Identificar estos problemas en etapas tempranas permite un tratamiento menos invasivo y ayudar a prevenir complicaciones más graves en el futuro.
- También puede tener un impacto positivo en la estética dental. Durante el procedimiento, se eliminan las manchas superficiales de los dientes, dando paso a una sonrisa más brillante y atractiva.
- La salud bucal está relacionada con la salud general del paciente. La prevención de ciertas complicaciones dentales no solo mejora la salud de la boca, sino que también puede reducir el riesgo de enfermedades sistémicas como enfermedades cardíacas o diabetes. Se ha demostrado que la enfermedad periodontal en especial, está asociada con un mayor riesgo de desarrollar estas condiciones médicas.
- Finalmente, una boca limpia y saludable tiene un gran peso en la confianza y la autoestima de una persona. Sentirse cómodo con tu sonrisa y saber que se está cuidando adecuadamente la salud bucal puede hacer que una persona se sienta más segura al relacionarse con los demás.
Frecuencia recomendada
La frecuencia recomendada para las limpiezas dentales puede variar dependiendo de la salud bucal del paciente. Sin embargo, en general, se recomienda realizar una limpieza dental cada seis meses.
Algunas personas pueden requerir limpiezas dentales más frecuentes debido a ciertos factores de riesgo. Por ejemplo, aquellos con enfermedad periodontal o una historia de caries dental recurrente pueden necesitar limpiezas más seguidas, aproximadamente cada tres o cuatro meses.
Sensaciones comunes después de una limpieza dental
Es común experimentar sensibilidad dental temporal, especialmente al consumir alimentos o bebidas frías. También es posible que ocurra un ligero sangrado de las encías o sensación de incomodidad en la boca debido a la manipulación durante el procedimiento. Estos síntomas suelen ser leves y temporales, y tienden a desaparecer en uno o dos días.
Para finalizar, recuerda que la limpieza dental puede variar dependiendo del paciente, y la salud de su boca, ya que en algunos casos son necesarios procedimientos adicionales.
En Clínica Cherizola Clavell nos importa tu bienestar a largo plazo, por lo que Una vez completada la limpieza dental, te proporcionaremos consejos personalizados sobre cómo mantener una buena higiene bucal en casa. Esto incluye recomendaciones sobre técnicas de cepillado, el uso adecuado del hilo dental, el tipo de cepillo dental a utilizar y sugerencias sobre el consumo de alimentos y bebidas que puedan afectar la salud bucal.
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